Una larga trayectoria profesional.

El Dr. Ignacio Palomo es el Jefe de Urgencias de Ginecología y Obstetricia del Hospital San Francisco de Asís. Tiene más de 25 años de experiencia profesional y un extenso curriculum profesional, entre el que uno de sus innumerables hitos fue la consecución del Premio de la Real Academia Nacional de Medicina por su Tesis Doctoral “Transplante hepático durante la fecundación y la gestación”.

¿Cómo ha evolucionado el campo de la ginecología en las últimas décadas?

La evolución ha sido tan vertiginosa que cuando empecé la carrera pensaba que iba a hacer una medicina diferente a la que hizo y me enseñó mi padre, ahora me doy cuenta de que estoy haciendo una medicina diferente a la que incluso estudié. En medicina los pequeños cambios son a diario, y los grandes cambios son casi por décadas. Estamos en una medicina completamente diferente a la del inicio del siglo XXI. Gracias a la globalización, todas las novedades se ponen en común en el acto y en cualquier parte del mundo.

¿Y la relación médico paciente?

Lo que más me gusta es traer niños al mundo y sobre todo cuidar a la vez de la madre y del niño. En mi clínica atendemos a las pacientes desde niñas hasta que son ancianas y les ayudamos en los pasos más importantes de la vida que son el embarazo y la muerte. También les ayudamos en la menopausia, otra fase bonita en la vida de la mujer. Es muy importante la medicina preventiva. Yo le digo a la madre que me traiga a su hija, no porque vaya a tener relaciones sexuales pronto, sino porque puede servir de agente de salud en su grupo, y si una amiga le hace una confidencia, le puede recomendar que vaya al ginecólogo al que ella fue con su madre. La relación médico paciente es fundamental.

Actualmente el concepto salud de la mujer está estrechamente ligado a su especialidad. ¿Cómo se trabaja en este campo?

Fundamentalmente se trabaja mediante la relación médico paciente respondida en la pregunta anterior, en el establecimiento de una sexualidad ordenada que permita el desarrollo de la mujer, la prevención de enfermedades y sobretodo la generación de un clima positivo para la paciente. Se trabaja de forma empática con todos y cada uno de los pacientes, comprendiendo sus situaciones, ayudando a resolver sus inquietudes y problemas y sobre todo ayudando al establecimiento de una relación positiva entre médico y paciente

¿Qué han aportado los avances tecnológicos a su unidad?

La investigación de las causas de infertilidad o subfertilidad ha llevado a resultados asombrosos sobre la fisiología hormonal y celular de los órganos de la reproducción, con conocimientos muy complejos sobre biología molecular e inmunología. Se tiene un conocimiento profundo del ciclo menstrual, la ovulación, la producción de espermatozoides…

Los recientes avances en Ginecología y Obstetricia nos guían actualmente a los especialistas al estudio y conocimiento de la biología molecular, inmunología, Así mismo, los avances en la imagenología y su precisión y nitidez, la mejor calidad de los instrumentos ópticos y quirúrgicos y las evidencias permiten que podamos reemplazar, en gran parte, los procedimientos quirúrgicos mayores por otros menos invasivos o por alternativas de tratamiento farmacológico. La cirugía laparoscópica e histeroscópica, el tratamiento farmacológico y la conducta expectante han reemplazado a las intervenciones quirúrgicas mayores en un porcentaje importante de patologías ginecológicas.

¿Qué especialidades son las más demandadas?

Sin lugar a duda la ginecología y obstetricia y la preparación de la mujer al parto, una fase maravillosa en la vida de una mujer y el ser humano.

¿Qué papel está jugando la ginecología actualmente en el diagnóstico precoz y tratamiento del cáncer?

El papel de la ginecología ha estado marcado por una clara evolución positiva de los tratamientos, pero en lo que se ha dado un giro vertiginoso es en el diagnóstico precoz. Si queremos luchar contra el cáncer hay que incidir en el diagnóstico precoz porque, por muy agresivo que sea, diagnosticado a tiempo, no es que sea tratable o que se prolongue la vida del paciente como se hacía antes, sino que se obtiene la curación de la enfermedad. Hay un problema con la gente que se manifiesta como hipocondriaca, y es que pueden retrasar el diagnóstico. Por eso mi mejor consejo es que la mujer haga sus revisiones planificadas anuales o semestrales ya que cualquier ante un cáncer ginecológico que se desarrolle en el plazo de un año, diagnosticado a tiempo, existen altas posibilidades no solo de salvar la vida, sino también de salvar su salud e incluso la maternidad.